Pocas son las situaciones en las que el tiempo le ha quitado la razón a Don Santiago Bernabéu.
Corría el año 1961 cuando el Real Madrid comenzaba la liga disputando su primer encuentro en Chamartín.
El Madrid, pentacampeón, ganador de 5 Copas de Europa seguidas, el mejor equipo de fútbol que jamás se había visto. El Madrid domina el encuentro. Va ganando 4-0 cuando empieza a disminuir la intensidad del equipo. Es entonces cuando algunos sectores de la afición empiezan a manifestar su descontento. En palabras de Santiago Bernabéu: "un sector se manifestó con silbidos y palmas de tango. No hay verdadera alegría en la masa del Madrid. ¿Qué es esto?¿Para quién estamos trabajando? Tenemos que garantizar que la actuación de los nuestros no falle ni un minuto. Entonces estamos destinados al fracaso. Estamos revestidos de verdadero sufrimiento".
Don Santiago ya hacía alusiones entonces a la masa del Madrid y sería entonces cuando afirmó que "la afición acabará siendo el tumor del Real Madrid".
30 años antes de aquéllo, en el período de entreguerras, José Ortega y Gasset publicaba su obra maestra "La Rebelión de las Masas" en donde realizaba la disección del hombre-masa, que en resumidas cuentas, trata del hombre vulgar e inconsciente, que espera que, como fenómeno natural, el mundo funcione de la misma manera que el Sol sale cada mañana, ignorando el esfuerzo que cuesta conseguir el desarrollo social y material necesario para que el mundo funcione como se espera. El hombre-masa no se siente en deuda con nadie, únicamente exige. En contraposición al hombre-masa se encontraría el hombre humilde.
Desde el punto de vista Orteguiano, se pone el foco en la sociedad y su concepción de masa, para explicar muchos comportamientos de las personas.
Volvemos a nuestro tiempo, y encontramos que el Madrid ha vuelto a lograr ser el único equipo en ganar 3 Champions League seguidas. El ahora presidente Florentino Pérez, afronta una situación parecida, pero con algunas diferencias. La primera de ellas no es más que 50 años de desarrollo social y deportivo,
que seguramente no sólo haya incrementado el nivel educativo del aficionado medio (y por tanto debería haber repercutido en su capacidad de juicio), sino que además el aficionado también ha tenido la posibilidad de experimentar éxitos y fracasos deportivos, y haber podido reflexionar sobre el origen de los mismos. El aficionado ha pasado por cientos de horas de tertulia futbolística, y no puede obviar que los jugadores hay que dosificarlos y que pueden lesionarse. El aficionado se ha hecho más culto a nivel deportivo también.
En cambio, ya hay sectores de la masa madridista que, o bien están pidiendo la destitución del presidente, o bien están insatisfechos con el presidente.
Tras 50 años (desde 1961), el hombre como ser humano, no puede haber evolucionado tanto, sigue heredando las características ancestrales del Homo Sapiens.
Tal como afirma el autor de "Sapiens", Yuval Noah Harari, el predominio sobre el resto de las especies se explica a partir de la capacidad de trabajo colectivo del ser humano. Además, el propio autor afirma en su última obra:
"Homo Sapiens no está hecho para la satisfacción. La felicidad humana depende menos de condiciones objetivas que de nuestras propias expectativas. Sin embargo, las expectativas tienden a adaptarse a las condiciones, incluidas las condiciones de otras personas. Cuando las cosas mejoran, las expectativas aumentan, y en consecuencia incluso mejoras espectaculares en las condiciones pueden dejarnos tan insatisfechos como antes".
Tal vez sea la voracidad y la insatisfacción del Homo Sapiens la clave para que haya logrado su subsistencia.
El Real Madrid ha conseguido ganar más Copas de Europa desde 1998 hasta ahora (7 Copas en 20 años), que las conseguidas desde el principio hasta 1998 (6 Copas en 40 años).
Por tanto, Don Santiago Bernabéu se equivocó. No sólamente el Madrid no ha sucumbido al tumor de su afición, sino que además se ha hecho más fuerte.
El punto de vista de Ortega, con el foco en la sociedad, explica muy bien comportamientos típicos de las masas. Pero el Real Madrid ha conseguido subsistir ante estas adversidades. Ha conseguido rehacerse y reinventarse, no sin ayuda de grandes personas que han pasado por el club, como es el caso de Florentino Pérez.
Desde 1961 hasta ahora se han extinguido miles de especies en la naturaleza, pero el Real Madrid sigue estando ahí presente.
Si llegase el día en que se extinguieran todas las especies, el ser humano podría devorarse a sí mismo y acabar con la existencia humana antes que acabar con el Real Madrid,
siempre y cuando el Madrid siguiese siendo de los socios.