Al descanso todo parecía presagiar que sería cuestión de tiempo que llegase el gol del Madrid.
Pero el fútbol es impredecible.
Al reinicio del encuentro el club blanco perdió el control del balón.
Cambió la dinámica del partido, y el Valladolid supo encarar mejor la segunda mitad.
Los de Pucela encontraron un espacio en tres cuartos de campo del que podían sacar provecho.
Avisaron de que podrían lanzar contragolpes y asestar un mazazo a los blancos.
Lo hiciero una vez (ver video49'), y otra (ver video53'), y otra(ver video74'), y otra (ver video78'), pero la mala decisión del delantero y la buena actuación de Sergio Ramos aplacaron el contragolpe en varias ocasiones. Pero en el minuto 87' Oscar Plano recupera un balón en el centro del campo y tras hacer una breve conducción encuentra el hueco para servir un balón que define perfectamente Sergi Guardiola (ver video).
Éste es el motivo, añadido a la presencia de jugadores como Isco y Bale, por el que el espectador madridista miraba al banquillo del entrenador, culpándole del pinchazo en casa.
Sin duda la mejor noticia del encuentro, fue ver a Marcelo como un factor desequilibrante en el ataque después de mucho tiempo.